El servicio de psicología ofrece un espacio de comprensión, un lugar para conocerse mejor y entender qué está pasando. Ofrece una guía para adentrarse en un terreno tan incierto, tan poco tangible como son las emociones o la mente.
Las primeras sesiones están para obtener toda la información posible de la situación. A partir de ahí, valorar y escoger la vía de tratamiento más adecuada.
La mejoría consiste en un mayor bienestar con uno mismo y con los demás y se consigue a través del autoconocimiento, de cambios en el comportamiento y de un cambio de actitud hacia la vida.
La duración del proceso de psicoterapia varía desde unas pocas sesiones en casos sencillos a más de un año para personas con una problemática más compleja. La media está entre los tres y los nueve meses.